algo7383

Abraham y Moshé: de la ideología a la ley

Si la Torá se trata de fe y creencias, ¿por qué es tan central el cumplimiento de los preceptos, delimitados con reglas precisas y codificados en sus detalles?

Los dos grandes fundadores del pueblo de Israel fueron Abraham y Moshé.


El patriarca Abraham Abinu, “nuestro padre”, fundó la cultura monoteísta. A través de su generosidad y entrega al prójimo y su búsqueda espiritual e intelectual, se transformó en padre de muchas naciones, entre ellas, Israel.

Moshé Rabenu, “nuestro maestro” fundó al pueblo de Israel como tal. Fue quien sacó a los judíos de Egipto y les dio la Torá, la Ley, un código de justicia y rectitud.

Abraham gestó el pueblo y creó la cultura del vínculo del hombre con Di-s. Puso de manifiesto e impartió los valores del bien y la misericordia. El pacto con Abraham fue ideológico: mediante la argumentación razonada y el ejemplo de su conducta, Abraham logró convencer a mucha gente de seguir su camino.

Moshé lideró al pueblo en su tránsito de la esclavitud a la libertad y selló el pacto de la Ley. Creó el sistema jurídico: entregó leyes, preceptos y estatutos que regulan la vida individual y social en todas sus facetas.

Una sociedad no puede vivir solo con ideología. Tiene que tener una aplicación legal concreta con esa ideología. Gracias a eso, el pueblo judío sigue existiendo como pueblo; sin un sistema legal, la ideología se hubiera diluido. La ley, la Torá, viene a ajustar y a consolidar los valores morales que el hombre tiene y fueron difundidos por Abraham. Si bien el hombre fue creado con moral y ética, también fue creado con el instinto animal, la debilidad que lo aleja de la moral. Las personas somos propensas a desviarnos del camino correcto, siguiendo nuestros propios deseos e intereses, en vez de los valores eternos.

Abraham y Moshé tenían las mismas características de conducta: la cualidad de la humildad y la sabiduría. Fueron enviados por Di-s para darnos herramientas para ser mejores personas. Abraham nos reveló la ética y la moral, y Moshé la Ley para poder sostener esos valores.

En ambos líderes vemos representado el sistema natural del progreso del hombre y de la sociedad. Abraham y Moshé fueron los fundadores de los dos pilares de una sociedad armoniosa y en paz, aplicable a toda la sociedad.